martes, 1 de abril de 2014
Decir que algo es para siempre es una cosa muy complicada.
No podemos saber si va a durar para siempre, para toda la vida.
Puede ser que si, puede ser que no.
Puede ser que con el timpo las cosas cambien y vayan tomando distintos caminos.
Y ese para siempre, en realidad dure un poco de tiempo.
Me quede pensando en una frase que decia, "¿Cuanto tiempo dura el para siempre?, a veces tan solo un segundo".
Y me puse a reflexionar sobre eso.
Hay veces que decimos cosas sin pensarlas del todo.
Hay veces que prometemos sin ser conscientes de lo que estamos haciendo.
Pero.. ¿saben que? El otro dia nos cuestionamos eso y dijimos que no podiamos decir que nos ibamos a amar para toda la vida. Pero despues de decirlo hubo algo que me sucedio. Me agarro un nudo en la garganta, algo que me hizo hasta sollozar. A el le paso lo mismo. Entonces volvi a confirmar que lo que sentiamos era real. Volvi a confirmar que se trata de el verdadero amor.
Me puse mal solo por decirlo. No habia sucedido. Solo era una idea que habia quedado ahi en el aire y que me dolio mucho.
Es cierto que a veces no somos conscientes de lo que prometemos, pero otras veces la promesa es real, lo que se dice es verdadero. No son solo palabras que se las lleva el viento. Sino que es un sentimiento completamente certero.
Aprendi que algunas cosas si son para siempre.
No podemos saber si va a durar para siempre, para toda la vida.
Puede ser que si, puede ser que no.
Puede ser que con el timpo las cosas cambien y vayan tomando distintos caminos.
Y ese para siempre, en realidad dure un poco de tiempo.
Me quede pensando en una frase que decia, "¿Cuanto tiempo dura el para siempre?, a veces tan solo un segundo".
Y me puse a reflexionar sobre eso.
Hay veces que decimos cosas sin pensarlas del todo.
Hay veces que prometemos sin ser conscientes de lo que estamos haciendo.
Pero.. ¿saben que? El otro dia nos cuestionamos eso y dijimos que no podiamos decir que nos ibamos a amar para toda la vida. Pero despues de decirlo hubo algo que me sucedio. Me agarro un nudo en la garganta, algo que me hizo hasta sollozar. A el le paso lo mismo. Entonces volvi a confirmar que lo que sentiamos era real. Volvi a confirmar que se trata de el verdadero amor.
Me puse mal solo por decirlo. No habia sucedido. Solo era una idea que habia quedado ahi en el aire y que me dolio mucho.
Es cierto que a veces no somos conscientes de lo que prometemos, pero otras veces la promesa es real, lo que se dice es verdadero. No son solo palabras que se las lleva el viento. Sino que es un sentimiento completamente certero.
Aprendi que algunas cosas si son para siempre.
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